Una de las tareas de limpieza que causan un mayor impacto a nivel medioambiental, es el lavado de ropa, especialmente en lo referente a consumo de recursos. Estos procesos presentan un alto consumo de energía y agua, que según algunos estudios pueden llegar a suponer hasta la cuarta parte del consumo total de estos recursos en un establecimiento hotelero.

 

Dada la importancia que tiene este departamento en el sector hotelero o residencial, es complicado plantear una reducción en los consumos de agua de lavado de ropa o de temperatura de lavado, sin que se comprometa la calidad del proceso, cuyo resultado es crítico para la imagen del establecimiento y la satisfacción de los clientes. Además de que un aumento del rechazo en el proceso de lavado añade presión a los departamentos de lavandería que en los momentos de máxima ocupación suelen estar al límite de su capacidad productiva.

 

En Diversey hace años se comenzó a trabajar en el desarrollo de productos que redujeran el impacto de las operaciones de lavado de textiles, sin comprometer la calidad de los resultados ni los tiempos del proceso. Fruto de aquellos trabajos fue el lanzamiento de Clax Advance, un sistema de productos que permite realizar lavados a temperatura media. Ahora vamos un paso más adelante y lanzamos Clax Polar.

 

Clax Polar es un conjunto de productos para el lavado profesional de ropa que consigue reducciones de energía de hasta un 65 %, de agua de hasta un 50 % y de tiempo de hasta un 20 %. Estas reducciones no son producto de cálculos de laboratorio sino que están calculadas a partir de las pruebas realizadas durante el proceso de comprobación del sistema, en varios establecimientos hoteleros en condiciones reales de trabajo.

 

¿Por qué conseguimos estos resultados? Por dos razones:

 

1º- Porque conseguimos lavar a temperaturas inferiores a 30 °C sin comprometer los resultados. Esto hace que además del ahorro energético, se reduzcan los tiempos de espera debidos al calentamiento de agua.

2º.- Porque utilizamos productos químicos que permiten realizar un solo aclarado final, en lugar de los dos o tres habituales, con el consiguiente ahorro de agua y tiempo.

 

Estos ahorros de energía, agua y tiempo se han conseguido mejorando los niveles de blancura en los textiles, con reducciones de la carga bacteriana presente en los tejidos de hasta un 99,9999 % (6log) a 20 °C y con mejoras cercanas al 20 % en la perdida de resistencia a la tensión, un indicador del daño que sufren los tejidos en el proceso de lavado.

Este último dato, tiene gran importancia económica para el establecimiento ya que supone prolongar la vida útil de los textiles y también en términos de sostenibilidad. Se estima que el 20 % del agua consumida por la agricultura y más del 20 % de los pesticidas lo son para cultivos relacionados con el textil y las fibras sintéticas que se desprenden de los procesos de lavado suponen una tercera parte de los microplásticos presentes en las aguas marinas.

Por ello con el uso de Clax Polar conseguimos una mayor vida útil de los tejidos, una reducción de los consumos de agua y energía y una mejora en la productividad de las instalaciones al reducir los tiempos de los procesos.

 

Valentín Sánchez Herencia

Country Application & Training Coordinator